Los preparativos, para la fiesta y todos los festejos, fue con la intervención de muchas personas, no sólo las hijas y algunos de los nietos, también participaron algunos parientes próximos a la abuela y también los amigos más cercanos. Dentro de los Colaboradores se destacaron: Carlos Alberto Barbery, Silvino Parada Chavez y Chinga Ortiz de Pereyra. Cato, Chica, Tita, Romel, Carlitos, Sandra, Ceci y Luis Fernando, además del amplio apoyo digital de la cadena “los 90 de la ABUELI”.
No se descuidaron de ningún detalle, pero solamente falló la tamborito, que no llegó y la patasca que llegó un poco tarde, pero en compensación, Gustavo le tocó y canto las canciones, que con toda seguridad le llegaron al el corazón de la abuela, abundantes en amor, porque eran las canciones que su marido, Manuelito Bravo, le cantaba, mucho antes de que las hijas se casaran y cuando ni pensaba, ni en nietos y bisnietos. …Quien puso puñales en tu pecho, dime mujer lo que has hecho con mi pobre corazón, El Duraznero y …como gotitas de agua…
La fiesta del viernes 7 de agosto de 2015, salió tan perfecta como la programaron, la comida una delicia, no falto el buen vino, la cerveza, el whisky y los refrescos. Los chocolates estaban esquicitos, la servilletas decoraban las mesas con su correspondiente inscripción y la torta salió mejor que a pedir de boca. No faltaron los mariachis, con sus consabidas mañanitas y otro montón de bonitas canciones, adecuadas al momento y fue muy emotiva la participación de las cantoras, primero un solo de Chica Bravo Vaca Diez, después un trio de las hermanitas Bravo Vaca Diez, China, Chinga y Chica, después otro solo de Cheryl Bravo Limpias.
Hubo discursos, habló el nieto mayor Tavin Sanchez Bravo, palabras muy emotivas y después, la Negrita Menacho en representación de las PCS dijo unas palabras muy bonitas y obsequio un cuadro recordatorio del acontecimiento. Luego habló la Sra. Dra. Luz en representación del Voluntariado y de Dabosan, también dijo palabras que llegaron al corazón de todos los presentes, como conclusión, la abuela Sarita agradeció e invitó a brindar a brindar a todos los presentes.
Hubo buena musica y bailaron mostrando gran felicidad, el más bailador fue su bisnieto Lucas Aramayo Roca. Concluyo la fiesta con besos y abrazos, fueron algo así como ciento cincuenta invitados, todos muy unidos a la abuela por lazos de parentesco y amistad. Todas las hijas y nietas bien peinaditas y maquilladas, todas bonitas y bien pintudas. Recibió muchos regalos, pero lo que más agradó a la abuela, fue que todas las mesas estaban completas y no quedó ni un espacio libre. Todo fue en su lugar, todo muy emotivo. Termino a hora prudente.
Al día siguiente, sábado, todos durmieron un poco más y se encontraron para almorzar chicharrones en Guabirá, donde se hizo pascana con este objeto para continuar rumbo a La Providencia, donde continuaba el festejo, pero esta vez única y exclusivamente entre parientes, donde la abuela guió lo que sería el “asado en horno tapado”, el mismo que salió como estaba previsto, sabroso y a la hora justa, pero desde la llegada se brindó al extremo que se acabó la cerveza y se tuvo que volver a comprar, para seguir tomando sin necesidad de brindar. Las ensaladas una delicia, ni que decir de la yuca, el ají, el palmito tradicional y el con salsa golf. Los mayores, hablamos mucho, recordamos viejos tiempos, los jóvenes también charlaron de algunos recuerdos y los bisnietos chiquitos se divirtieron hasta quedar exhaustos.
Llegó la hora de dormir y no hubo ninguna dificultad para hospedar a cincuenta y cuatro personas, el lugar donde durmieron los chicos, tuvieron una invasión de hormigas, de esa que tienen mal olor, los mosquitos nos dejaron descansar, incluso a los que no están acostumbrados a ellos. Nadie se quejó de los ronquidos, a una cierta hora chilcho y después cayó un mangón, que por su intensidad, a los que estaban en carpas les afectó y tuvieron que buscar cobijo, primero debajo de los árboles y después en el corredor bajo techo.
El despertar fue muy tranquilo, a medida que se incorporaban al desayuno, cada uno elegía lo que quería servirse y los bisnietos más chicos y algunos de los nietos se pusieron a visitar el corral para ver la ordeña, los demás después de desayunar nos quedamos viendo la gran actividad. Después se fueron al atajado y hubieron unos cuantos que se metieron al agua, que pese a estar fría les agrado.
Mientras algunas mujeres que colaboraban, se ponían a la tarea de levantar los restos del desayuno, para luego preparar el majadito, freír los plátanos y huevos, calentar carne y yuca, preparar la ensalada de tomate y cebolla, mientas se hacían esos preparativos llegó el fotógrafo, que fue programado para la ocasión y comenzó el show de fotos, primero la abuela sola en diferentes poses, conduciendo el tractor, en el corral, en la tranquera, con las hijas mujeres, con todos los cuatro hijos, con las nietas mujeres, con los nietos hombres, con todos los nietos, con las bisnietas mujeres, con los bisnietos hombres, con todos los nietos, con los hijos y sus cónyuges, con los nietos y sus esposas, fotos de cada una de las hijas con su miembros y la abuela, la foto de todos los presentes. En fin todas las fotos habidas y por haber y algunas en dos poses, pero con una selección y prueba de poses.
Sólo faltaron dos nietos con sus familias: Ingrid Bravo Cirbian, con sus dos hijos y su hija, además de Mauricio Aramayo Bravo, con sus dos hijas, su hijo y su esposa. A quienes se extrañó mucho, pero porque están en el exterior, no pudieron estar presente la primera en USA y el otro en Indonesia, Mauricio y su familia, dejaron fotos, porque estuvieron unos días antes y se organizó una churrasco para que se tomen fotos con la abuela y la polera que se preparó para el acontecimiento y que fue el uniforme para que se tomen todas las fotos.
Algo que nadie notó, es que también estuvo contratado, un escribidor, un tipo que durante todo el tiempo estuvo “ojo al charque”, tomando apunte de todo lo que sucedía, que únicamente se comunicaba conmigo y es quien me dejó escrito, no sólo lo relatado hasta aquí, sino lo que sigue, que fue para lo que lo contrataron. Transcribo tal cual me lo dejó y que corresponde a algo así, como el gajo de un árbol genealógico, donde se detalla a cada uno de los componentes de ese gajo, gajo que se mantienen gracias al gran amor de la abuela Saruca y el gran cariño que le tienen todos los miembros del mismo.
A continuación transcribo lo que me dejo el escribidor, que si tuviera algún error les pido lo corrijan, para que esto quede como acompañamiento del álbum de fotografías:
Manuel Bravo Justiniano, recibió como herencia de sus padres el puesto que se denomina La Providencia”, que pertenecía a una gran propiedad que se llamaba “El Cuco”, ubicado en la provincia Warnes, del departamento de Santa Cruz de la Sierra. Manuel se enamoró de la hijo de un pariente que se llamaba Romelio Chávez Justiniano, Se casó con ese gran amor que era muy peladinga y se la llevó a vivir a La Providencia y allá procrearon cuatro hijos, Mary Nelda (Chica), Elard (Mocito), Sarita (Cato) y Lenny(tita). La primera y la tercera nacieron en La Providencia y los otros dos en el pueblo.
Chica se casó con Miguel Aramayo Mejía y tuvieron dos Hijos Carlos y Mauricio. Carlos se casó dos veces del primer matrimonio con Daniela Diez de Medina, nacieron tres hijos, Carlos Andrés, José Ignacio y Lucia. El segundo matrimonio con Sandra Roca tuvo al hijo menor Lucas. Mauricio (Picho) se casó con Blanquita Callaú y tuvieron tres hijos Maria Laura (Lali), Fabiana y José Miguel, que fueron los ausentes.
Mocito se casó con Elizabeth Cirbian y con ella tuvo a dos hijos, Ingrid, que se casó dos veces, la primera vez con Harold Reynolds, con quien tiene dos hijos, Harold y Daniel, el segundo matrimonio con Michel Oswald, tuvo una hija, Alexandra. El segundo hijo Elard Manuel Romelio (Romel) que tiene dos hijos en Santa Cruz, Laurita y Alejandro, pero además tiene una hija en Japón que no recuerdo el nombre y otra en España, que también se llama Sarita. El Tercer hijo se llama Fernandito Bravo Asad, que con una japonesa tiene una hija, que no recuerdo el nombre. Mocito se casó en segundo matrimonio con Mirian Cisneros, con quien tienen dos hijas, Carolita que se casó con Paul Justiniano y que tiene dos hijos Andrés y Micaela. Monica se casó con Mauricio Suárez y tiene un hijo, Mauricio.
Sarita (Cato) se con Gustavo Sanchez Criales y tuvo cuatro hijos, Gustavo (Tavin), que en su primer matrimonio tuvo un hijo, Gustavo (Tavicin) en segundo matrimonio con Mariana Lopez, tiene dos hijos, Manuela y Mateo. Sarita (Neni), se casó con Javier Lopez Videla y tiene tres hijos, Andres, Sarita y Matias. Monica (Coti) se casó con Fernando Alcocer Velasco y tienen dos hijas, Natalia y Luciana. Alvaro (Pilo) se casó con Juliette Lugo y tienen un par de mellizos, Diego y Rebeca.
Lenny (Tita) se casó con Marcelo Medina Salinas, con quien tienen cuatro hijos Marcelito que se casó con Geraldina Zagal y tienen un hijo, Santiago. Luis Fernando que se casó con Carla Calvi, tiene dos hijas Diana y Adriana, además de uno porvenir. Cecilia (Ceci) se casó con Gerardo Pereyra Roda y tienen dos hijos, Nicolás e Isabela. El último hijo, Diego (Chipiri), se Casó con Daniela Egüez (Pollita) y todavía no tienen hijos, por lo que todos en la familia esperan con ansias la llegada de los pollitos.
Como podrán haber notado el escribidor estuvo muy minucioso, pero si consideran que debo decirle que añada algo más, lo que se hubiera olvidado o que no hubiera tenido la precaución de anotar, estamos a tiempo, para que adicione lo que ustedes sugieren y que sea con sus propias palabras o con las palabras de ustedes. Estoy a disposición de ustedes, para pasar el mensaje al escribidor, de manera de tener la versión final.
El festejo fue aprovechando un feriado largo, que se usó de una buena manera, porque lo mejor que tuvo, es que mostró que son una familia unida, que rebalsa cariño, que derrama amor y cuya unión, en gran medida es mérito de la agasajada, la abuela Sarah Chavez de Bravo (Saruca) que festejó sus noventa años por adelantado, dado que su cumpleaños es el 12 de agosto.
Miguel Aramayo.
SCZ. 10-08-2015