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Obsesionado por el amor.

15 Feb

Obsesionado por el amor.

Revisando en la historia y la leyenda sobre grandes amores, encontré algunos que realmente me sorprendieron, quizá mucho más que Romeo y Julieta, que no es más que una novela de a imaginación de Chaspare. El tema es muy extenso y se encuentran historias encantadoras, como las que hablan de Bolívar y Manuelita Sáenz, de Napoleón Bonaparte y Josefina Beauharnais, Cleopatra y Marco Antonio, de Juana la Loca y Felipe el Hermoso, de Tristán e Isolda, Elizabeth Taylor y Richard Burton, Eduardo VIII y Wallis Simpson, Eva Duarte y Juan Domingo Perón y muchos, pero muchos más. 


También me puse a revisar historia y leyenda de amantes famosos y fueron dos las historias que me conmovieron más, la primera: Bonnie y Clyde, fueron unos famosos forajidos, ladrones y criminales de Estados Unidos durante la Gran Depresión. Esta pareja de delincuentes captaron la atención de la prensa norteamericana y fueron considerados como «enemigos públicos» entre 1931 y 1935. Aunque la banda fue conocida por los robos a bancos, Clyde Barrow prefirió el robo a pequeños comercios y gasolineras. Hay numerosas historias de cómo se conocieron Bonnie Parker y Clyde Barrow. Murieron a manos de la policía en una emboscada cuando pretendían escapar para bridarse mutuamente su amor, en el escape dejaron la cámara fotográfica y esas fotografías publicadas por la prensa  hicieron famoso su amor.


Mientras leía esto, que aunque no les parezca, realmente interesante y conmovedor, me quedé dormido y lo que les voy a relatar, no estoy seguro si lo leí en la Torá, en la Biblia o en el Corán, pero les quiero anticipar que no todo es de mi invención y mi ingenio, es mucho de historia, de leyenda y fantasía.


Se trata de la sorpréndete historia de la vida de la Reina de Saba, hermosa, dotada de una inteligencia y diplomacia excepcionales, sobre todo, su juramento de perpetua virginidad, que marco su destino cuyo rumbo quedó alterado, con el amor y el placer encarnados en el rey Salomón.


La reina de Saba visita a Salomón. Salomón le envió un mensaje, casi un ultimátum, a lo cual la reina le respondió enviándole un inmenso tesoro, lo cual irrito a Salomón, quien le contesta, que todo eso no tenía valor, comparado con el valor de la sabiduría. No dejándole otra opción que realizar un viaje, por el peligroso desierto arábigo para realizar un trato personal con Salomón, de quien conocía su sabiduría y de su poder de hablar con los animales e incluso de comunicarse con los espíritus. Al encontrarse, y a pesar de las 700 mujeres «legales» y las 300 concubinas que tenía Salomón, se enamoraron mutuamente, quedando ella admirada de los conocimientos de él y él de la inteligencia y hermosura de ella.


La reina de Saba (Bilquis en árabe) la engendró una mujer amante de un consejero del rey. Cuando nació fue entregada al espíritu Umaya que la confinó en un remolino del desierto, este espíritu le pidió que fuera la nueva reina de Saba, destronando a un rey malvado y tirano. Ella accedió, logro entrar en las habitaciones reales, lo mató y se proclamó la nueva reina de Saba.


Según el Corán, Salomón había enviado un cuervo en busca de una apreciada abubilla, éste la encontró en un lejano oasis llamado el jardín de los dos paraísos; la abubilla contó a Salomón que allí moraba una hermosa y rica reina. Salomón enrollo un escrito a la abubilla encomendándola que se lo entregará a esta reina, dándole casi un ultimátum para que se rindiera a su reino.


Según los textos bíblicos, la reina llegó a Jerusalén, quedó deslumbrada por el templo y por la sabiduría de Salomón. Permaneció tres años en Jerusalén, logrando un tratado de no agresión y comercio entre estos dos reinos. Sólo intimó con Salomón la última noche. Salomón trazó un plan, con la excusa de la despedida, alargo hasta tarde la estancia de la reina en su palacio , le conminó a que dadas la hora se quedará a dormir en el palacio, pero ella le hizo prometer que nada intentaría él, accedió, pero con una condición que ella no cogiera nada del palacio, aun enfadada por ser tratada de ladrona estuvo de acuerdo con el trato, los sirvientes de Palacio dejaron una vasija con agua al lado de su cama, cuando ésta se disponía a beber, una mano la sujetó, era la del propio Salomón, dijo tu no cumpliste tu parte yo no cumpliré la mía, entrenándose los dos a una noche de pasión, noche de la cual la reina engendró a su único hijo Menelik.


Cuando la reina se dio cuenta que estaba embarazada emprendió nuevo viaje hacia sus tierras. Veinte años después, su hijo Menelik regresó para conocer a su padre, quien inmediatamente al notar el gran perecido, lo reconoció y le ofreció toda clase de honores. Según la tradición etíope, Menelik viajó a Jerusalén a ver a su padre, quien lo recibió con alegría y lo invitó a quedarse para gobernar tras su muerte, pero Menelik rechazó la oferta y decidió regresar. Abandonó la ciudad con nocturnidad y llevándose consigo la reliquia más preciosa, el Arca de la Alianza, y la trasladó a Aksum, donde todavía se encuentra hoy, en una cámara especialmente construida para ello en la Iglesia de Santa María.


Miguel Aramayo

SCZ. 15-02-2015 Mi madre cumple 89 años.