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Amores históricos

19 May

Amores históricos

Tratando de escribir sobre amores famosos, me encontré con una cantidad increíble de parejas cuya unión se considera de ese tipo de amores y como “de muestra es suficiente un botón”, les presento una lista de los que aparecen como mas llamativos y son de gente que conocemos la mayoría de las personas: Cleopatra y Marco Antonio, una historia de amor apasionante (y trágica) – El amor de leyenda de Shah Jahan y Mumtaz Mahal. – El duque de Windsor y Wallis Simpson, una historia de amor que supera al poder. – Liu y Xu, una historia de amor prohibido. – Richard Burton y Elizabeth Taylor un amor eufórico y escandaloso.

 

Escribir sobre esos amores seria repetitivo y no es mi objeto, porque creo que todos hemos leído sobre esos amores, muchas revistas, libros y películas ya los mostraron o los detallaron con exageración. Lo que me interesaría es profundizar un moco en las causas físicas y psíquicas que influyen en las personas para que lleguen a la situación de demostrar amores apasionados.

 

La musica, la poesía, los aromas, los sabores también influyen en el proceso del enamoramiento, pero creo que el proceso de enamoramiento es mucho más complejo, mucho más profundo y por lo poquito que he leído sobre el tema el amor es realmente digno de estudio y son muchos los científicos que le han dedicado tiempo extenso estudiándolo y documentando.

 

El amor modifica nuestro cerebro e induce a cambios en nuestro sistema nervioso central, pues activa un proceso bioquímico que se inicia en el córtex, da lugar a respuestas fisiológicas intensas y produce una gran sensación de euforia (similar al de algunas drogas como la cocaína). Investigaciones recientes concluyen que el amor es un impulso y una motivación más que una emoción. Nos hace sentir que estamos en lo más alto, pero también puede llevarnos a la autodestrucción, si no sabemos comprender el desamor.

 

Según Stephanie Ortigue, de la Universidad de Syracuse (Nueva York) publicó en la revista Journal of Sexual Medicine, que el amor activa hasta 12 áreas del cerebro, las cuales trabajan en conjunto para liberar las sustancias químicas como la dopamina, la oxitoxina, la vasopresina, la noradrenalina o la serotonina.

 

La Dra. Theresa Crenshaw, en su libro “La alquimia del amor y la lujuria”, explica que no cualquiera puede hacernos sentir esta mágica sensación, pero cuando el enamoramiento ocurre, entonces, y solo entonces, la cascada de neuroquímicos del enamoramiento estalla para cambiar nuestra percepción del mundo. Las hormonas y neurotransmisores más importantes que intervienen en el proceso de enamoramiento el amor son las siguientes: Feniletilamina (PEA): esta sustancia inunda nuestro cerebro. Produce un efecto estimulante y la sensación de “estar en una nube.” Norepinefrina: tiene una gran influencia en el estado de ánimo, la motivación, el foco atencional y la conducta sexual. Adrenalina: es similar a la noradrenalina, se podría decir que desde un punto de vista funcional no hay diferencias entre ambas, excepto en que la función de la adrenalina es predominantemente fuera del sistema nervioso central (aunque también actúa dentro como neurotransmisor).

 

Existen muchos más compuestos, que solo los nombraré: Dopamina, serotonina, oxitoxina que es la que llega a que se formen lazos permanentes en la pareja. La vasopresina, promueve lasos afectivos fuertes. Theresa Crenshaw, en un intento de explicar su función, dice “La testosterona quiere irse de fiesta, la vasopresina quiere quedarse en casa”, en referencia su influencia atenuadora en el deseo sexual de los individuos. En definitiva, promueve el pensamiento más racional y menos caprichoso, proporcionando estabilidad.

 

A mi criterio, todo ese bombardeo de substancias en nuestro cerebro deja huellas (cicatrices) que son imborrables, porque quedan grabadas en nuestras neuronas y se mantienen en nuestra conciencia o subconsciencia y es por eso que se dice “Solamente una vez se ama en la vida”, lo cual puede ser que funcione para uno y no para todos, dependiendo del tamaño de la cicatriz.

 

Miguel Aramayo

SCZ.23-03-2021