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Qué bello estar distraído y atento

4 Mar

Qué bello estar distraído y atento

Qué bello estar distraído y atento

 

La música, para mi es un elemento gelatinoso que me permite transitar por su superficie me transporta a diferentes lugares. Logra que mi conciencia se sienta flotando sin la influencia de la gravedad. En mi caso mientras me abstrae una melodía, no siento si estoy de cabeza, parado o de costado. Solo siento que mi espíritu es transportado a otra dimensión diferente en la que habita mi cuerpo.

 

Cada melodía, para mi tiene consistencia que no corresponde a simples sonidos de acordes y ritmos. Las letras no son únicamente palabras pronunciadas en una forma poética, son expresiones del alma que muestran sentimientos. La música es un elemento que deja mi cuerpo en reposo, distraído y atento, hace que mi alma se eleve con una consistencia difícil de describir, porque asume consistencias de substancias que no pueden ser descritas con simples palabras. Cada instrumento produce vibraciones diferentes de acuerdo al sentimiento influido por quien lo emplea para expresar una composición.

 

Me pongo a pensar en compositores e intérpretes como Johannes Chrysostomus Wolfgangus Theophilus Mozart​, más conocido como Wolfgang Amadeus Mozart, Ludwig van Beethoven​, Franz Liszt, Piotr Ilich Chaikovski, Frederic Chopin y muchos otros que los nombrados, con respecto a la llamada música clásica. También pienso en otros compositores como John Lennon, Carlos Gardel, Armando Manzaneros, Francisco Canarozzo (conocido como Canaro), Ángel Agustín María Carlos Fausto Mariano Alfonso del Sagrado Corazón de Jesús Lara y Aguirre del Pino (conocido como Agustín Lara) o Paul McCarthy de la música popular, junto con innumerables hombres y mujeres que compusieron en ese género. Me los imagino a todos, como gente muy especial, con la cualidad de poder combinar acordes, tonos, ritmos, instrumentos y a la vez acoplar letras con sentidos y sentimientos tan amplios y al mismo tiempo concretos.

 

Se puede decir que fueron ellos los artífices de bellas composiciones. También la naturaleza tiene forma de expresión musical a través del piar de muchos pájaros. Los sonidos de muchos otros animales e incluso la voz humana escuchada a capela. El sonido del viento arrancando acordes al recorrer diferentes lugares, paja brava, gajos de árboles o follaje de bosque. El agua al caer en cascada de ríos o el golpetear las olas del mar. Incluso la lluvia al golpear en diferentes superficies muestra distintos sonidos, pero me atrevo a decir que hasta el silencio tiene una forma de sonido que pueden percibir algunas almas.

 

El silencio es, para mí, el sonido que acompaña la soledad, no solo se percibe, se siente, y me atrevo a decir que desprende una fragancia y que tiene un sabor agradable, pero para eso uno debe estar concentrado al punto que el alma aflora a la superficie de la piel y se confunde con el medio ambiento que lo rodea.

 

Miguel Aramayo

SCZ.21.07.2023

 

A continuación, un ejemplo de algo abstracto y al mismo tiempo concreto de bella música y letra:

 

Voy a apagar la luz para pensar en ti y así, dejar volar a mi imaginación. Ahí, donde todo lo puedo, donde no hay imposibles, qué importa vivir de ilusiones si así soy feliz. ¿Cómo te abrazaré? ¿Cuánto te besaré? Mis más ardientes anhelos en ti realizaré. Te morderé los labios, me llenaré de ti y por eso voy a apagar la luz para pensar en ti. Contigo aprendí que existen nuevas y mejores emociones. Contigo aprendí a conocer un mundo nuevo de ilusiones. Aprendí que la semana tiene más de siete días, a hacer mayores mis contadas alegrías y a ser dichoso, yo contigo lo aprendí. Contigo aprendí a ver la luz del otro lado de la luna, Contigo aprendí que tu presencia no la cambio por ninguna. Aprendí que puede un beso ser más dulce y más profundo. Que puedo irme mañana mismo de este mundo. Las cosas buenas ya contigo las viví y contigo aprendí que yo nací el día en que te conocí. Armando Manzanero Canche