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Hay chistes que hacen reír y otros que hacen llorar

5 Feb

Hay chistes que hacen reír y otros que hacen llorar

Hay un grupo de cómicos argentinos que ya tienen un tiempo en el escenario, y por lo tanto algunos de sus chistes de antaño, son muy conocidos y todavía surgen como buenos. Uno de esos números inolvidables, me llegó vía Internet y vi que en su momento pudo ser chiste (“Frases imperdibles de Les Luthiers”), pero se adapta plenamente a la situación que está viviendo nuestra querida y pobre Bolivia, nuestra Bolivia, pobre y querida.

 

Como dice nuestro Presidente con respecto a retroceder quinientos años, los cómicos argentinos le responderían: ¿para qué?, si “Todo tiempo pasado… Fue anterior”. Y todos sabemos que en lo que dicen los que nos gobiernan hay una serie de contradicciones, porque hace quinientos años los aymaras eran esclavos de los quechuas, quienes llegaron a esas tierra, tierras que no son del oriente, fueron Manco Cápac y Mama Ocllo, enviados por el Dios Inti, para salvar de sus pecados a los aymaras, que estaban degenerados y no respetaban a Dios. Pero al no recordar la historia se puede aplicar esta otra frase de los cómicos argentinos: “Pez que lucha contra la corriente, muere electrocutado”.

 

Con todo lo que está sucediendo en esta pobre Bolivia, con toda la mentira, con toda la corrupción, corrupción a todos los niveles, mucho más corrupción a los MAS altos niveles, alguien podría decir, mejor dicho, muchos expresan, que “tienen la conciencia tranquila”, pero sin embargo los cómicos argentinos dirían: “Tener la conciencia limpia, es síntoma de mala memoria”. Además complementarían con otra frase: “Los honestos, son inadaptados sociales”. El hecho de que sean inadaptados, no es porque sean socialistas del siglo XXI, puede ser por algo que también dicen los cómicos: “El que nace pobre y feo, tienen grades posibilidad de que al crecer…Se le desarrollen ambas condiciones”.

 

Ahora que los periodistas y las circunstancias, las circunstancia y los periodistas, estén haciendo escarnio de la corrupción descubierta, o mejor dicho de la corrupción que afloró en el momento menos oportuno para el gobierno, es como que se está produciendo un terremoto, un derrumbe, todos quieren hacer leña del árbol caído y los cómicos argentinos habrían dicho: “¿Si la montaña viene hacia ti? ¡Corre! Es un derrumbe”.  Complementando, después de todo “Lo importante no es ganar, es hacer perder al otro”, si esto por lo que lo inculpan, no es más que un simple contrato, contrato de sólo ochenta y seis millones de dólares.

 

Pero el pobre hombre descubierto con las manos en la maza, el hombre del que quieren hacer leña, usando palabras de los cómicos argentinos, podría decir otra frase: “No soy un completo inútil… Por lo menos sirvo de mal ejemplo”. Claro que los que lo acusan y juzgan, que quizás hubieran disfrutado de algo de lo que él recaudo, le podrán decir otra frase de los mismos cómicos: “Si no eres parte de la solución… Eres parte del problema”, por lo tanto has perdido el aprecio y te juzgaremos, pero esperamos que no abras la boca para hacernos quedar mal, eso te puede resultar peor.

 

El ¡pobre imputado!, con lagrimas en los ojos, o quizá con la mirada fría del juzgado, en su fuero interior debe estar rogando que no le apliquen la “justicia comunitaria” y posiblemente use otra frase de los cómicos argentinos, que dice: “Errar es humano… Pero echarle la culpa a otros, es más humano todavía”. Y añadirá, en busca de su salvación, otra frase del mismo grupo, que a la letra dice: “Lo importante no es saber, sino tener el teléfono del que sabe”, añadiendo: “Yo no sufro de locura, la disfruto a cada minuto”.

 

Para defenderse de los ataques feroces de los malos que lo tienen acorralado, el árbol caído dirá otra frase del grupo argentino: “La inteligencia me persigue, pero yo soy más rápido”, y complementará para terminar, con otra frase, de las frases imperdibles de los Les Luthiers, que dice: “La verdad absoluta no existe… Y eso es absolutamente cierto”. Que no le tiene miedo a lo que le pueda sucederle porque se ira donde exista MAS amor, donde “Hay un mundo mejor, pero es carísimo”. Un mundo donde no existan pajaritos chismosos, aunque como dicen los cómicos argentinos: “Si  un pajarito le dice algo… Debe estar loco, porque lo pájaros no hablan”. Y le recomendaran con otra frase: “No te tomes la vida en serio, al fin y al cabo no saldrás vivo de ella”, no como amenaza, porque podrás vivir feliz sin el MAS y lejos de este mundo cruel, este mundo en serio, que no comprenden los cómicos, que dice: “Felices los que nada esperan, porque nunca saldrán defraudados”.

 

 

Luis Alviña