Amor, amor, ¡amor!
El titulo que pongo a esta nota, no es en mención de la canción que dice: “Nació de ti, nació de mí, de la esperanza; amor, amor, amor, nació de Dios para los dos, nació del alma. Sentir que tus besos se anidaron en mi…”. (Canción compuesta por Gabriel Ruiz e interpretada por los mejores cantores románticos). No, es porque ayer tuve la oportunidad de ver una presentación que me envió un amigo y que la compartí con varios amigos y que corresponde a una corta biografía del Presidente Electo de los Estados Unidos de Norte América. Presentación que desde la primera foto y la primera frase trasciende amor.
Es una presentación con fotos de familia, como que fuera alguien muy próximo al Presidente que las entregó a quien preparó el “PowerPoint”. La primera foto de su madre, deja ver que él tiene rasgos muy semejantes a los de ella, especialmente por la forma de jajo (mentón) y defecto en una pieza dental, ese mismo rasgo se ve en su abuelo materno (el jajo). La señora tiene una mirada tan tierna y una sonrisa tan franca, que observando esa expresión uno queda convencido de que se trata de una buena mujer, una buena hija, una buena madre, una buena amiga, lo cual se corrobora con lo que expresa la presentación; que ella obedeció a sus padres y se quedó con ellos en lugar de optar por una universidad lejos de ellos.
Cuando se observan las fotos del Presidente Electo, con su madre, siendo un niño muy pequeño, se aprecia el amor que destilan ambos, esa sonrisa permanente en la cara de él, es la misma sonrisa franca de la cara de su madre y, si el amor pudiera fotografiarse como expresión sublime, esas fotos muestran amor. Pero el mismo amor se ve en las fotos, en las que su madre posa junto a sus padres siendo una niña y siendo una adolescente, esas fotos muestran además de amor una sólida formación de familia, de una familia muy chica y muy unida. Muestra sencillez, seriedad, serenidad. Lindas fotos.
Las fotos que más me impresionaron, por el amor que muestran y la afinidad que trasciende a trasluz, son las fotos del Presidente Electo con su abuelo materno, las mismas muestran a un hombre trabajador, cariñoso, serio. Un hombre que infunde confianza, pero al mismo tiempo infunde aprecio. Se lo nota bondadoso, pero al mismo tiempo estricto, seguidor de normas, de moral, de convivencia familiar y social. Tiene cara de bueno, manos de cariñoso y cuerpo de hombre trabajador y respetuoso.
Las fotos de su padre, también muestran no solo sus rasgos fuertes de su raza, sino la intelectualidad, que hizo que elija entre el desarrollo personal y abandone el amor y sus sentimientos personales. La foto familiar donde se muestra a su padrastro y a su hermana Maye, dejan ver que el indonesio era un hombre bueno, pero por lo que se lee, fue una relación de pocos años y nuevamente el retorno próximo a sus abuelos maternos, lo que demuestra que esa fue la fuente de la que se nutrieron emocionalmente su madre, él y su hermana.
Otra foto que me gustó mucho y en la cual ya se puede apreciar el carácter formado del Presidente Electo, es la foto en la que se lo ve ya joven junto a sus abuelos, quizá en esa foto ya esté por terminar el colegio o quizá en sus primeros años de universidad.
Las fotos de su matrimonio, también dejan entrever que la unión con su madre continúa y se aprecia que su esposa también tiene lazos de amor con la suya, es una típica foto de matrimonio, pero lo notable en la misma es la diferencia étnica con los rasgos de su madre, la que en la misma toma muestra la felicidad de madre por ver a su hijo realizado.
Con lo visto y lo leído de la presentación ha cambiado substancialmente mi forma de pensar con respecto al próximo Presidente de USA, me alegro por ese país, por el mundo y, me alegro por lo que nos pueda tocar de su mandato, porque de lo poquito que se ve y se lee, se aprecia que es un hombre que se formó en amor, amor de madre, amor de sus abuelos, especialmente de su abuelo, amor de su esposa y amor de sus hijas, pero seguro que también sufrió discriminación, notó las diferencias raciales y que seguramente influirán en su forma de ver las cosas en una cosmovisión del mundo en el que deberá actuar.
Cuando uno ve tanta dosis de amor en una persona, primero que se siente feliz por ella, por quienes lo rodean y por la influencia que pueda tener él con él mundo, pero al mismo tiempo dejan la esperanza de ver lo mismo en tu entorno, no solo en el entorno próximo, sino en tu pueblo, en tu país y da envidia al observar que lo que tenemos como país, nuestro país, nuestro entorno, es lo contrario de lo que se ve en esta presentación.
Miguel Aramayo
SCZ. 6-12-2008