El plan se tiene que cumplir, sí o sí
Por lo que leo, veo y escucho, estoy convencido que el MAS está cumpliendo un plan, mejor dicho “varios planes”. Vasta ver el “foro de Sao Paulo” que es un plan inventado por Lula, que tuvo la suerte de que la naturaleza le brinde un Chavez y otros cuantos locos más y que ahora están convenciendo a otros que tienen necesidades económicas o de alimentar sus egos, en procura de una América izquierdista… Que un corto plazo lo tendrá como a su dios y gran profeta a Fidel. Otro plan es la “Marcha hacia el Oriente” que tiene todas las características de haber sido ideada por Chavez, al igual que la “Constitución masista”, la “Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América”. El MAS también tienen sus planes que los maneja desde sus albores como organización social. Pero todos los planes originales fueron montados desde el exterior, principalmente de Europa, por organizaciones que después fueron las que financiaron a las ONG´s.
Es muy notorio que uno de los objetivos primarios es destruir el aparato productivo y en el tiempo que llevan en el poder, que todavía no son tres años, ya han logrado que tengamos un retroceso de treinta años, por lo menos, en lo que corresponde a hidrocarburos, pero el plan es que debemos retroceder más de quinientos, seiscientos o más años. Hace quinientos años no existían tratados de libre comercio, es más no existía comercio internacional, no existía escritura, no existían celulares, no existía energía eléctrica, era tan sólo la sabiduría de los “achachis”. También hay que destruir la agricultura y la ganadería, porque genera “oligarcas” y para esto el gobierno tuvo la ayuda de “El Niño” y “La Niña”, gracias a los sahumerios y otros rituales satánicos y el apoyo de los santos de su religión cósmica.
Otro de los objetivos es mentir a toda la población hasta tenerla a sus pies, engañarla con diferentes tipos y formas de constitución, pero en realidad lo que quieren es imponer una dictadura, una dictadura sin religión, sin cultura, sin raza, para volver a ser lo que eran los aimaras (los del imperio Tiwanaku, antes de que lleguen sus salvadores los quechuas (Los Incas), los que los gobernaron, hasta la llegada de los españoles.
Como el imperio Tiwanaku se degeneró al extremo que el Dios Sol tuvo que mandar a sus hijos para salvar a esos brutos aimaras. En el plan que están aplicando se comprende que quieren retroceder a esos albores y por lo tanto a sus ancestros y su religión cósmica, donde hasta las piedras tienen sexo, pero que está permitido comer carne humana). (“Las gentes vivían como fieras y animales brutos, sin religión, ni política, sin pueblo ni casa, sin cultivar ni sembrar la tierra”).
Para poder comprender ese plan usé algo de lo escrito por el Inca Garcilaso de la Vega, cuyo padre era un español que llegó al Perú acompañando a Pizarro y su madre una de las princesas, sobrinas del Inca, por lo tanto fue amamantado por esa mujer, y pese que a su vez tuvo la educación del padre, por sus venas corría sangre india, sangre inca, sangre quechua y no aymara. Posteriormente su padre lo envió a España, donde escribió las primeras historias sobre el incario. (De donde me base para este escrito, que se incluye por separado).
En ese su libro entre muchas cosas trata de contar lo que aprendió en su niñez, del “origen y principio de los incas”, cosa que escuchó de boca de su madre y sus hermanos, tíos y otros mayores. En esas pláticas trataban del origen de sus reyes, de la majestad de ellos, de la grandeza de su imperio, sus conquistas y hazañas. Una vez el Inca Garcilaso pregunto: “Inca, tío, si no tenían escritura entre ustedes, cómo guardan en su memoria las cosas pasadas, si los españoles para esto conservan escrito todo los que les pasó desde sus orígenes. ¿Quién fue el primer Inca? ¿Cómo se llamó? ¿Qué origen tuvo su linaje? Y muchas otras preguntas más”.
El Inca le respondió: “Esta tierra era de grandes montes y breñales, las gentes vivían como fieras y animales brutos, sin religión, ni política, sin pueblo ni casa, sin cultivar ni sembrar la tierra, sin vestir ni cubrir sus carnes, no sabían labrar ni hacer vestidos. Vivian en cuevas, comían como bestias, yerbas, raíces y frutas incultas y carne humana. A las mujeres las tenían como brutos, porque no supieron tenerlas ni propias ni conocidas. Nuestro padre el Sol, viendo a tales hombre, se apiadó y tuvo lastima de ellos y envió a un hijo y una hija suyos para que adoctrinasen, para que lo adorasen y tuviesen su Dios. Para que vivan en casas y poblados, supiesen labrar las tierras, cultivar las plantas y mieses, criar ganado y gozar de ellos y de los frutos de la tierra, como hombres racionales y no como bestias. El Padre Sol puso a sus dos hijos en laguna Titicaca, también les dio una varilla de oro, con la recomendación que donde la hincasen en el suelo y se hundiese con un solo golpe, que allá parasen e hiciesen su asiento y corte. El padre Sol les dijo algo más, cuando hayan reducido a esas gentes a nuestro servicio los mantendrás en razón y juicio, con piedad y clemencia”.
Luis Alviña