Ciencia ficción
Lo que les contaré no es un cuento para mis nietos, es un cuento para mis amigos, especialmente para mis amigos que están en el exterior y que tienen las noticias distorsionadas, no sólo por falta de información, sino por un manejo muy bien adecuado a cambiar la verdad, de la verdad de algunos medios de comunicación internacional, que están manipulados, manipulados notoriamente, porque con plata se puede hacer todo, incluso usar a los pobres en beneficio de unos cuantos que todavía no son tan ricos como pretenden ser y van camino a eso, hasta parecerse al Sr. Soros que también los colabora muy disimuladamente, por lo menos comprando “RECON”. En estos casos es bueno recordar un refrán que dice: “lo mal habido se lo lleva el diablo”, u otro que dice: “lo que por agua viene, por agua se va”.
En un país, país que no es el “país de los cocos”, de la película de Cantinflas, pero que guarda mucha similitud con ése. Un día ganó las elecciones un personaje que tenía grandes posibilidades de cambiar ese país, pero que en muy poco tiempo se alineó a alguien al que le debía unos pesitos (Bolívares Fuertes), porque lo ayudó en su campaña y ese acreedor le recomendó como colaboradores a un grupo de gente, que después de un tiempo comenzó a mostrar las uñas y me atrevo a decir que incluso le están “serruchando” el piso y desplazando sin que todavía se dé cuenta de esa situación. Principalmente dos personajes, el de los discursos fuertes y el de los discursos finos y que lee mucho.
El país de los cocos de Cantinflas, en esta historia tendrá el nombre que le corresponde, que es muy parecido: “El país de los Locos”. Ese país, está a punto de entrar en guerra, porque la información está siendo manipulada de una manera científicamente, manejada con la ayuda de un librito que se titula “Mi lucha” (en alemán “Mein Kampf”) y un amplio departamento de prensa que no sólo maneja y arma las noticias aquí, sino que a nivel internacional, para mostrar al mundo que son avasallados por cuatro familias de oligarcas que cuentan con un millón de miembros.
Los que manejan el país de los locos, que en un principio se mostraban muy ¡proletarios…!, ¡humildemente vestidos…!, y con un ¡lenguaje mesurado…!, han soltado la lengua y ahora les ofrecen a los gobernadores de la otra porción del país, a los oligarcas a quines los une una luna y los diferencia un montón de cosas. Les ofrecen enterrarlos en lo más profundo de la tierra y ponerles epitafios rogando que convivan con los gusanos. Como única arma están usando la información y la propaganda manipulada, pero además tienen un arma secreta que no se llega a captar y que consiste en trajes, corbatas y zapatos caros, que se cambian con mucha frecuencia y, hasta sin bañarse, pero muy bien afeitaditos y peinaditos a la gomina, con lenguaje muy pulcro y mostrando un alto uso de la tecnología, especialmente en el manejo de imágenes, en video y PowerPoint.
Los humildes proletarios que gobiernan el país de los locos, están muy bien apoyados por organizaciones internacionales, de la UE, UNASUR y la OEA. Con ese pequeño apoyo y su gran humildad están mostrando al mundo que pueden hacer “puchi” a los oligarcas unidos por la luna y da la impresión que lo están logrando, porque con los videos montados, los PowerPoint elaborados finamente, con el apoyo de jueces reflotados y testigos muy bien preparados están pasando una buena representación a sus amigos, socios y correligionarios internacionales, para la complacencia del mundo. Hasta el Papa está convencido que el país de los locos está siendo agredida por los oligarcas unidos por la luna, sin siquiera hacerle caso al Cardenal de los oligarcas, que incluso tienen eso a su favor.
Los oligarcas unidos por la luna, se muestran como los villanos, villanos que en una primera instancia prepararon un golpe “Civil Prefectural”, para lo cual importaron “cascos y escudos atómicos” y con el apoyo del ¡imperio!, preparaban derrocar el poder del país de los locos, también preparaban emboscadas para eliminar “originarios inocentes e ingenuos”, pero los oligarcas fueron tan imbéciles, que dejaron capturar a su “sanguinario prefecto” de un pueblito del norte, que siendo tan chiquito puede ser derrotado fácilmente por los locos, con una pequeña ayuda logistica de chavos caribeños. Por suerte antes de que suceda esa infame emboscada, se expulsaron a las huestes del imperio que camufladas en USAID y la DEA, que colaboraron a los oligarcas unidos por la luna. También lo expulsaron al embajador del imperio que era quien proveía de fondos y ¡bombitas…!, (urra – urra – ¡bomba…!) a los oligarcas.
Los oligarcas están actuando de muy mala manera, están apoyados por un grupo de jóvenes que se llaman “unionistas” y que están haciendo destrozos en las instituciones del país de los locos y asustando con armas y un gran terror (porque son temerarios y están armados hasta los dientes, inclusos armados con la verdad) a los pobres miembros de un partido humilde del país de los locos que es MAS pobre y ¡desprovista de armas…!, incluso de armas espirituales, y que los unionistas aprovechan de esa desventaja. Lo último que pudieron descubrir la policía y los eficientes servicios de inteligencia caribeños y el ejercito de los locos al mando de un macaco (El macaco Mayor, si no me equivoco) es que los oligarcas tenían un arsenal de guerra donde les descubrieron “armas de destrucción masiva” (4), granadas antitanques (8), misiles aire tierra, tierra aire (miles, muchos miles), incluso les descubrieron “estampitas con retratos de los santos mas perversos”, incluso una foto de la Mamita de Cotoca.
Los que gobiernan el país de los locos, únicamente quieren aprobar su constitución, una constitución que elaboraron muy prolijamente y en paz y no en La Paz, sino en Caracas, sin dejar opinar a la oposición y cuando ésta quiso hablar, los castigaron con latigazos, después de una sesión de masticación de coca y como los malos de la oposición seguían molestando queriendo opinar, se llevaron sus huestes a un cuartel y un ministro de los locos se encargó de matar ¡solamente a tres malos! de esos que están unidos por la luna y que van camino a ser oligarcas y que para poderla terminar se trasladaron a un pueblito frío donde casi, casi la aprobaron y la dieron por terminada y ahora, solamente la quieren aprobar “a las buenas o las malas” para ponerles “el pie en el coto”, no sólo a los oligarcas, sino a un montón de otros blancoides que viven en el occidente, y que de puro miedo ahora están calladitos, pero que también son del lado contrario y a favor de la luna, aunque no abran la boca, por el miedo de que les apliquen la justicia comunitaria, ¡que es tan justa! Y la saben manejar muy bien los gobernantes del país de los locos.
Miguel Aramayo
SCZ. 11-10-2008
