El sufrimiento
El sufrimiento que sentimos por estar encerrados y privados de algunas cosas, no tienen nada que ver con el sufrimiento que sintieron otras personas en otras épocas. Eso no parece que es simplemente historia, pero pienso que sería bien recordar algunos momentos de esa historia y poderlos ver con ojos que observen la realidad de esa época y la comparen con lo que ahora nos parece a nosotros que es ¡sufrimiento…!
La pregunta acerca del sentido del sufrimiento es la pregunta acerca de la experiencia de la falta de sentido, pues justamente en esa experiencia consiste el verdadero sufrimiento. El sufrimiento es aquello contra lo cual yo, al menos de momento, nada puedo hacer. Tenemos miedo del sufrimiento, y ya ese mismo miedo es sufrimiento. Pero el sufrimiento es algo distinto del dolor físico.
Existen cuatro causas del sufrimiento consciente emocional: el temor, la frustración, la sumisión y el «No querer hacer» y el «No poder hacer». Cabe aclarar que estas cuatro causas del sufrimiento consciente pueden generar gran placer inconsciente a la persona. No se puede hablar de sufrimiento inconsciente, según el psicoanálisis, como tampoco se puede hablar de sentimiento o sensaciones inconscientes.
No me da la capacidad para poder imaginar el tipo de sufrimiento de nuestros ancestros, pero me imagino que dentro de lo primitivo que eran ellos, seguramente el hambre, el miedo, el frio, el calor; fueron las causas primeras del sufrimiento, esto hablando de nuestros ancestros racionales, los que supuestamente fueron beneficiados del “soplo Divino”, a partir de ese momento se sintieron desnudos y desprotegidos y lo primero que su “conciencia” les permitió, fue crearse dioses que le protejan, el sol la luna, el fuego, las altas montañas. A medida que fueron más capaces incluso crearon libros que relataban sus creencias religiosas, primero en forma verbal, luego con tablas de barro, esto cuando descubrieron la escritura, hasta el momento que Gutenberg creo la imprenta.
Algo que está documentado, es el sufrimiento del pueblo judío cuando fueron esclavizados por los egipcios, también el sufrimiento del pueblo egipcio cuando fue objeto de varias plagas causadas por el Dios del pueblo oprimido, hasta que éste logro liberarse. Después, el sufrimiento de cuarenta años en el desierto en busca de la tierra prometida.
El desarrollo de la humanidad y las diferentes culturas que habitaron este pueblo, siempre estuvieron expuestos al sufrimiento. Las guerras de los griegos en diferentes etapas de su historia y los sufrimientos relatados en obras como la Ilíada y muchas otras. La proliferación de dioses, diosas, semidioses y héroes, muestran que la humanidad en esa época sufría por la incertidumbre e ideaba dioses para diferentes motivos. Para defenderse del sol, del viento, del amor y muchos otros males que asechaban a esas sociedades. Males que son los mismos asechos a los que seguimos siendo sometidos, pero que ya no recurrimos a dioses, aunque en realidad seguimos recurriendo a ellos, porque es una forma de protegerse de los males el clamar al Altísimo de diferentes maneras. Al final de cuentas nuestro intelecto es el que crea esos sufrimientos y ahora los modernos usan la psicología para atacar esos males de las personas.
Con lo que expreso, no quiero quitar validez a las creencias religiosas que tenemos las personas, porque estoy convencido, que incluso los ateos creen en un ser superior y sienten miedo, lo cual es la causa principal del sufrimiento.
Miguel Aramayo
SCZ.23-08-2020