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May
Algunas veces es interesante sentirse que uno sabe mucho y en realidad lo que sabe, o mejor dicho lo que pretende saber, es tan poco, es tan insignificante y para demostrar eso sólo hace falta entrar a Internet, haciendo uso de un buscador, hacer consultas a la red y uno será “apabullado” por tanta información. La red se alimenta de muchas partes y ya no es necesario ir a una biblioteca, como lo hacíamos en nuestra adolescencia y juventud, ahora, todo lo tenemos en un “punto…”, desde cualquier computador que tenga acceso a una red, uno puede ingresar a la “gran vía…”.
Aprovechando de esa sabiduría trataré de incursionar un poco en historia, un poco en política, claro que como dije: “Sólo sé que no se nada” (Sócrates). Quise ver y comparar con USA, ellos están en el presidente número 44, en cambio los bolivianos, siendo más jóvenes que los norteamericanos, como país libre, ya casi perdimos la cuenta (+-105), porque a decir la verdad, es difícil contar cuantos presidentes hemos tenido. Porque incluso en una lista pormenorizada es difícil contar. Se puede ver, que en un día hemos tenido tres presidentes y dos junta y alguno no se nombra, porque su paso por el poder fue tan efímero. Eso es lo que sabemos y ¿lo que se manejo en secreto?, ¡secreto entre militares!, eso no cuenta en la historia. De todo ese montón de hombre que usaron el poder en Bolivia, la mayoría fueron militares, porque lo que se necesita para gobernar este pueblo, no es sabiduría, es fuerza, es matonaje y eso siempre estuvo en manos del ejercito (Poderosa FFAA.), incluso ahora. Claro que en el caso actual, es porque están comprados, o mejor dicho vendidos al gobierno y adoctrinados desde Venezuela.
Dentro de ese montón de gente que usó el poder en Bolivia, hay algunos que se destacan: Sucre por ser el primero, José Miguel de Velasco, por ser “camba” y cuatro veces presidente, desde 1828 hasta 1848. Andres de Santa Cruz, por ser hijo de una india de estirpe y haber sido el presidente de la “confederación Perú–Boliviana. Isidoro Belzu porque murió en manos de un tirano, tirano muy anecdótico (casi como el actual), llamado Mariano Melgarejo. Hilarión Daza, por la guerra del Pacifico. German Busch, por ser camba y héroe de la guerra del chaco, acecinado o “suicidado” en el palacio. Gualberto Villarroel, por movimientista y porque fue colgado en un farol de la Plaza Murillo, junto con algunos otros de sus colaboradores; traicionado por otro notable movimientista. Victor Paz Estenssoro, por la reforma agraria, la nacionalización de las minas, la reforma educativa, el voto universal, por populista y porque hizo mucho por los indios y todo quedó en nada. René Barrientos Ortuño, por populista, mujeriego y porque murió en forma rara, pero aparentemente su muerte fue ordenada por otro de sus camaradas, de otra arma pero militar, militar que también gobernó. Juan José Torrez, militar comunista, que quiso implantar “la asamblea del pueblo” y el comunismo; lo mataron en Argentina. Hugo Banzer Suárez, militar tirano, camba. Lidia Gueiler Tejada, por ser la primera mujer presidenta. Luis Garcia Meza, por ser corrupto, narcotraficante y asesino, que ahora está en la cárcel. Gonzalo Sanchez de Lozada, por haber colaborado con Paz Estenssoro en frenar la inflación que pasó del catorce mil por ciento y por haber privatizado las empresas del estado y que fue traicionado por otro que lo sucedió en la presidencia. Evo Morales, por indio, por dirigente cocalero y gran amigo de Chávez, porque le gustaba el fútbol y por… ¿? Incluyo al pie de pagina, la lista completa de los presidentes que hemos tenido y aclaro que hay algunos que no están nombrados, como el General Sattori.
El haber rememorado la cronología presidencial y haberme detenido en los presidentes que han mandado en este país, desde que vine al mundo, me surgió como anécdota, que casi a todos (los constitucionalmente elegidos) les di la mano en algún momento de mi vida, cuando viví en La Paz, pero ahora que estoy fuera de mi querida Bolivia, me da vergüenza, vergüenza ver que tantos hombres hubieran satisfecho su ego, se hubieran aprovechado de los movimientos sociales y de los indios, que los originarios sigan en la misma situación que estuvieron el 1826, cuando la independencia. Duele ver tanto tiempo desperdiciado, tanto recurso tirado a la basura, ver a tanto hombre intelectual despechado de su tierra, que para poder surgir tenga que salir de su terruño para ser apreciado, o ver a los que se quedaron, que se anquilosaron en la resignación de ver, de palpar, de saborear, tanta podredumbre.
La década del 50, vi algo parecido a lo que se está sucediendo en la actualidad y el 56 o un poco después vino el desplome económico y la “estabilización monetaria” y los “fondos de contra partida” y se vio surgir una cantidad de nuevos ricos apoyados en los pobres indios, algo similar a lo actual, pero no tan corrupto, como es ahora, porque entre los malos de la década del 50, hubieron intelectuales que supieron afrontar lo malo y salir. Pero ahora veo que intelectualidad en este gobierno no existe, todo es matonaje y lo peor es que no es un originario el que gobierna Bolivia, el que gobierna es alguien que estudió en la “Escuela de las Américas”, que por una extraña simbiosis con alguien del caribe, tiene a Bolivia sumida en una de sus perores crisis, quizá la última, la definitiva, antes de la división que se ve venir, porque es la división alimentada por ése, ése que nos gobierna y fomentada por el rey que no reina, que no reina ni como dirigente cocalero.
Luis Alviña.
Anexo de “hecho el analista”:
Presidente de la junta Militar Alfredo Ovando Candía 1964 – 1964 Alfredo Ovando Candía y René Barrientos Ortuño (copresidentes) 1964-1964 René Barrientos Ortuño 1964 – 1965 René Barrientos Ortuño y Alfredo Ovando Candía (copresidentes) 1965 – 1966 Alfredo Ovando Candía 1966 – 1966