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Juego de Chicos

29 Abr

Juego de Chicos

El bajo nivel intelectual del partido de gobierno, lo demuestran sus ministros que dicen que los libros perjudican, que Santa Cruz es linda sin los cruceños, que se debe dar coca en vez de leche, que se pueden vivir doscientos años, etc. etc.  Mezclado con el alto grado de complejos de inferioridad de la mayoría de su cúpula, feos tan feos que asustan hasta con la luz apagada y que tiene tantos dientes que la naturales les tubo que crear una boca más grande para albergarlos, o estilos muy finos de intelectuales refinados a los que les encantan las lociones, los trajes de marca y las poses fotográficas, o de otros que ni con gomina pueden dominar el pelambre. Con el complemento peor de una concentración de xenofobia de algunos de la cúpula y muchos de las bases, quizá por un gran mestizaje que quieren disimular tratando de ser mas indios, aplicando el uso de vestimentas que más bien los muestran como pequeños burgueses (Chamarras negras – play boy – muchachos irreverentes y rockeros). Defecto no porque sean indígenas puros, a quienes respeto y admiro profundamente, sino más bien al contrario porque tienen un alto grado de mestizaje que por la falta de estudios los hace presa fácil de desquiciados que se aprovechan de estas circunstancias para poner en practica sus ideas fueras de moda y contexto, para que los vean como héroes, algo así como los chicos ven a power ranger, o como los de mi generación vieron a Batman y Roby, Superman, o recientemente el hombre Araña o mucho antes Caliman.

 

No se dan cuenta que esa forma de gobierno no dio resultado, solo basta ver el nivel de pobreza y desnutrición de Cuba que exporta médicos y alfabetizadores que en realidad son lobos disfrazados de objetas, los cuales tuvieron una lavado cerebral profundo y que quieren aplicar lo mismo en nosotros los bolivianos que somos una sociedad propicia para que experimenten con nosotros y nos creen seres como Frankestein.

 

Sin embargo desde 1917 esa teoría del comunismo ha tenido el rumbo hacia su destrucción,  la prueba se ve en Polonia con el personaje (Lech Walesa) que desde los astilleros y con la colaboración histórica del Papa Juan Pablo Segundo logro llevar a Polonia por otros rumbos y sacarla de la miseria y ponerla al nivel que está ahora, pero que le falta mucho comparando con países que se liberaron antes. Con la Perestroika y Mikhail Gorbachev y ver a hora lo que Rusia debe hacer para poder liberarse de casi un siglo de opresión y si no pregunten Vladimir Putin. Recientemente en Ucrania con el gobernante (Víktor Yushchenko) a quien quisieron envenenar, otro pueblo largamente oprimido está viendo la forma de salir de la tara a la que lo llevaron en 1917- Hasta en Rusia nos está mostrando que quiere cambiar.

 

Pienso que es una condición intrínseca del hombre el querer mejorar, no solo intelectualmente, sino que lo primero debe ser tener un adecuado desarrollo económico que le permita satisfacer sus necesidades básicas, luego mejorar intelectualmente para continuar las mejoras económicas y después buscar nuevos horizontes, no solo para uno mismo como individuo, sino para todo el conjunto como colectividad.

 

Este gobierno impulsado por todo lo explicado y cumpliendo el deseo de sus ídolos del Norte (Chávez y Castro),  quieren llevar a la práctica algo que ya está por desaparecer o por lo menos se lo está viendo de una manera diferente, porque tenemos ejemplos muy próximos a nosotros de que la izquierda puede hacer mucho como el caso de Chile y un poco más lejos, España, Francia, Alemania o los países que son más ricos (no a nivel económico sino a nivel social) porque están en la cúspide del primer mundo, no como poderes económicos, sino como niveles de mejor tratamiento comunitario, como Holanda, Suecia, Suiza.

 

Mientras quienes nos gobiernan, en vez de avanzar hacia adelante están pretendiendo destruir las fuentes de trabajo, eliminar el aparato productivo, destruir al cinco por ciento que son los que tienen las riquezas para repartirlas entre el sesenta por ciento de pobres y perjudicar al treinta y cinco por ciento de clase media, para que el cien por ciento se alimente de excrementos, y solo la cúpula del partido, que es menos del uno por diez mil de la población,  pueda tener lo que antes tenia el cinco por ciento.

 

Viendo este panorama no quiero quedarme callado y quiero compartir con alguien más estos mis sentimientos y pedir que estemos atentos para que estudiemos la forma de mejor nuestra patria y cambiar esta payasada que estamos viviendo.

 

Miguel Aramayo

SCZ 29-04-2006