¿Locura o mentira?, ¿mentira o locura?
Siento un dolor profundo.
Mis ojos están a punto de derramarse en llanto.
Mis oídos perciben sonidos de voces perversas.
Mi tacto está acelerado, porque mi corazón sufre.
Mi olfato también está irritado por el viento malo.
Siento la boca amarga porque presiento días feos.
Todo en mi ser se revela.
Se revela porque son muchas las mentiras.
Mentiras de quienes nos gobiernan,
Mentiras de quienes dicen ayudarnos,
Mentiras del mundo, mentiras de todos.
Mentiras y sólo mentiras.
Saber que uno llegó en la vida a un punto,
Punto en el que se piensa todo conquistado.
Punto en el que uno agradece a Dios.
Agradece a Dios por todo lo recibido.
Y llega alguien y cambia ese orden y dice,
Dice cosas incoherentes, cosas malas.
Sentir que uno vivió pensando en el bien,
Bien para los demás, que es bien para uno.
Con la seguridad de un buen camino corrido,
Corrido y recorrido con mucho esfuerzo,
Esfuerzo que pensó concluido y logrado.
Y se encuentra en el vacío, sin nada recorrido.
La gente que dice que nos gobierna,
Que mintiéndonos cree gobernarnos,
Pero que solo miente en su beneficio.
Que no tienen nada, ni Dios, ni ley.
Que viven una utopía que les contaron
Y creídos, nos la quieren implantar.
Confío en que Dios les dará cordura.
Cordura necesaria para no dañarnos
Para que puedan darse cuenta de su locura,
Locura que sólo conseguirá matarnos,
Matarnos los unos a los otros, por nada.
Por sólo complacer los gobernantes.
Miguel Aramayo.
SCZ. 23-09-2008