info@miguelaramayo.com

Mi memoria

29 Nov

Mi memoria

Mucha gente queda sorprendida con mi memoria, incluso mi madre, mi hermana y mi amigo Dudy me hacen esa observación y, para mi es algo que lo encuentro lo más normal. Mejor dicho, lo encontraba lo más normal hasta hace un momento que leí un artículo en uno de los periódicos que pasan por mis manos.

 

Existe un síndrome conocido como «Memoria Autobiográfica Muy Superior» (HSAM, por sus siglas en inglés) o “hipertimesia”. Este trastorno neurológico extraordinario, significa que algunas personas se pueden acordar de todas y cada una de las cosas que pasaron en su vida, desde edades muy tempranas. Las personas con hipertimesia pueden recordar sin esfuerzo y de forma inmediata lo que hicieron, lo que llevaron puesto o dónde estaban y a qué hora. Pueden rememorar noticias y acontecimientos con un detalle fotográfico y con una precisión equiparable a una grabación.

 

La hipertimesia fue descubierta en 2000 y sólo se conoce a 60 personas en todo el mundo que la padecen. Desde luego que yo no estoy contado en esa estadística, pero al leer el artículo, me di cuenta que yo podría ser uno de los afectados por ese síndrome y es por eso que tengo tantos recuerdos almacenados en mi “tari” (coco) y lo que algunas personas creen que estoy mintiendo, no es mentira, es que realmente conservo esos recuerdos, con esa precisión.

 

Se sigue investigando mucho sobre este síndrome, ya que es bastante nuevo. Pero algunas investigaciones sugieren que el lóbulo temporal (que ayuda a procesar la memoria) es mayor en el cerebro de los individuos con hipertimesia. También tienen más grande el llamado núcleo caudado, que ayuda a aprender, pero también puede desempeñar un papel en el trastorno obsesivo compulsivo. Hipertimesia significa que los recuerdos se graban con sumo detalle y, a pesar de que es fascinante para la ciencia, puede ser un tormento para quien la padece, no en mi caso, a mí me divierte.

 

El artículo nombra a una persona, Rebecca Sharrock, que es una persona que sufre ese síndrome y que fue estudiada por los científicos que le diagnosticaron hipertimesia, pero adicionalmente a esto, esa persona también sufre de autismo. Me pongo a pensar en mí y analizo, que algunas de mis características cuando era niño, e incluso hasta ahora, se asemejan a ese problema: extrema inquietud, hiperactividad, falta de concentración, mi gran problema de ortografía deficiente (pésima), muy hablador, con un gran amigo imaginario, muy nervioso, impaciente, etc., etc.

 

Estoy feliz de ser como soy y pienso que, si realmente tuviera ese síndrome, me ha servido de mucho para poder escribir todo lo que he escrito y para recordar pasajes de mi vida desde cuando tenía aproximadamente tres años y lo primero es que recuerdo el trajecito marinero, blanco con adornos azules y la pechera negra de la crema de zapatos que le pasé con un cepillo, mientras mi padre buscaba el trapo para sacar brillo a los zapatos, además de la tremenda paliza que recibí por eso, el lugar donde estaba sentado, la dirección de la casa donde sucedió eso. Adicionalmente a ese recuerdo, cierro los ojos y dan vuelta en mi mente parientes, amigos, lugares, colores (palo de rosa, azul marino, cris marengo), sabores (el flan de vainilla), olores (eucaliptos, pinos, ruda, clavelinas, madreselva) y todo lo que conservo en mi mente.

 

Miguel Aramayo

SCZ.29-11-2017