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Poemas

21 May

Poemas

Tengo la cabeza llena de poemas, porque no es sólo mi cerebro el que piensa, él está en constante conexión con mi corazón, y es éste el que pretende producir prosa, extraer lo que tiene mi mente para mostrar lo que lleva mi conciencia.

 

Cualquiera pensaría que soy loco, o estoy demente, pero es mi forma de ser, es la semilla que plantó mi madre la que hace que broten de mi alma pensamientos de amor, es mi mente la que traduce lo que llega a captar de mi corazón.

 

Incluso yo algunas veces pienso que realmente estoy desvariando o lo que tengo es algo escondido, que llevo adentro y que por ser tanto aflora, como si fuera un manantial. Lástima que mi intelecto no tenga la capacidad de poder expresarse
con palabras bonitas, con palabras que sean de una real melodía, de una real armonía y tan sólo sean palabras expresadas en cascada, como brotan de mi corazón. Y mi intelecto no logra adornar con expresiones cadenciosas y, únicamente emanen en bruto; como
la lava que expulsa un volcán o como la caída de las aguas de una cascada, que no pueden ser adornadas a medida que explotan en el cráter del volcán o caen por la pendiente de una catarata.

 

Puedo asegurar que lo que escribo en algunos momentos, como es el caso actual, son palabras que brotan de mí y que no las puedo retener, no corresponde a pensamientos elaborados con anticipación o expresados bajo la cordura, son palabras
que salen de mi interior en busca de la luz y para liberarme de lo que me aprisiona, de lo que podría perjudicar mi interior.

 

Pido perdón, por ser tan impulsivo y tan sin sentido, porque lo que sale de mi es lo que está dentro, muy dentro, y no quiero guardarlo, porque en mi alma puede ser que me causen daño, un daño mayor que el daño que puedo causar al expresar
lo que siento como inspiración y si lo expreso sin ninguna intención de dañar a los demás.

 

Miguel Aramayo

SCZ.23-03-2019