Rastreando en el subconsciente
El tema de investigar lo consciente y el subconsciente del ser humano, es algo que los hombres vienen realizando desde tiempos inmemoriales. Los griegos (sofistas) de la época de Sócrates, Platón, Aristóteles y muchos otros que engrosan una larga lista, se preocuparon de estudiar sobre estos temas llegando a resultados que son vigentes hasta nuestros días.
El hombre que revoluciono este conocimiento es el austriaco (nacido en la República Checa) de origen judío: Sigmund (Segismundo Salomon) Freud (médico neurólogo), el mismo que inicio algunos estudios con un médico francés de nombre Jean-Martin Charcot, con quien aplicaron la “hipnosis” con la finalidad de tratar la “histeria” y con Joseph Breuer desarrollaron el “método catártico”. Reemplazó ambos métodos por la “asociación libre y la interpretación de los sueños” y toda su experiencia desencadenaron en el “psicoanálisis”.
Según los judíos, existen dos tipos de conocimiento, los que estudian y conocen la Torá son personas que asumen su conocimiento de la capacidad de conectarse a Dios, que es Él que brinda la posibilidad de esos conocimientos. El erudito en Torá le debe su sabiduría a la conexión constante con Dios; de la misma manera, sólo podemos adquirir la sabiduría por medio de una conexión personal con el erudito. Pero la sabiduría secular puede ser adquirida sin tener necesariamente ninguna conexión espiritual ni emocional con la persona que la transmite.
Según mi opinión, el conocimiento nace de Dios, pero se ve incrementando y mejorando gracias a la acumulación que van haciendo los hombres en beneficio propio, que al final favorece a todos, porque “la letra entra con sangre” y eso significa, que uno tiene que sacrificarse para acrecentar sus conocimientos, pero si uno no los transmite a los demás se vuelve un egoísta. De cada uno depende el tener que recurrir a los conocimientos de diferentes formas y con diferente intensidad.
Al avanzar la tecnología, el hombre se está haciendo más flojo en la investigación y está dejando de investigar, dejando esa tarea a los que, si se interesan y mejoran la tecnología, dando las facilidades, para que los flojos encuentren lo que buscan usando la tecnología. A medida que la ciencia de la “inteligencia artificial” esté al alcance de más personas, la dejadez será mayor. Con la existencia y la proliferación de las redes neuronales la inteligencia de las maquinas es cada vez será mayor y llegará un momento que supere la capacidad intelectual de los eruditos, con lo cual la inteligencia artificial tomará el lugar de los pensadores humanos.
Los problemas neuronales también serán solucionados con los avances científicos, el implante de chip en el cerebro o sus cercanías, podrá solucionar muchas enfermedades, incluso traumas como la “obsesión” o como las “manías”. Ya existen pruebas que esos implantes electrónicos, incluso devuelven la memoria a gente que tuvo problemas de amnesia y devuelve el movimiento a gente que había quedado cuadripléjica.
No debemos descuidarnos y tenemos que continuar leyendo, que es una forma de adquirir conocimientos y debemos utilizar la tecnología a nuestro favor, para incrementar mayores conocimientos y no solo beneficiarnos de los conocimientos almacenados en la nube y que pueden tener acceso por medio de los celulares.
Miguel Aramayo
SCZ.23-12-2019